Rodrigo y Gabriela

El lunes pasado se llevó a cabo el ansiado concierto de Rodrigo y Gabriela en el Teatro Metropolitan de la Ciudad de México donde se dio cita un público heterogéneo entre los cuales me encontraba.

Conocí a estos grandes músicos mexicanos gracias a un cover de Stairway to Heaven (original de Led Zeppelin, por si alguien no lo sabía :D) y desde entonces quedé enganchado. Su estilo folkflamencojazzmetalerolatino me encanta, y es por eso que no podía perderme esta cita del 26 de Octubre.

Su último redondo (11:11) fue dedicado a varios músicos, donde destaca una canción titulada Chac Mool dedicada al recientemente finado Jorge Reyes. Y fue precisamente en este tenor que se desenvolvió el concierto con una representación de la característica ofrenda de muertos.

Llegué al evento barriendome en home o al menos eso pensaba, ya que arribe al lugar cinco minutos después de la hora (en el boleto decía que el concierto empezaba a las nueve). El encargado de "calentar al público" fue Rocco DeLuca, solista con un estilo de blues que suena muy bien. Pero estábamos ahí por Rodrigo y Gabriela, así que la espera se me hacía eterna.

Al terminar la presentación de Rocco unos asistentes empezarón a colocar papel picado al frente del escenario, lo que me hacía suponer que el concierto tendría algún tipo de evocación de nuestra celebración. Y no me equivoque.

Nueve y media marcaba el reloj cuando el telón se levantó y nos dejó ver esa ofrenda dedicada cinco músicos (Jimmy Hendrix, Dimmebag Darrell y Jorge Reyes son los que alcancé a distinguir). Flores de cempasúchil, calaveras y una iluminación con tonalidades moradas creaban la atmósfera perfecta para la ocasión.

La única foto que pude tomar al principio del chow

Después de dos canciones Rodrigo saludo al público "Que onda, hace como diez años que no pasamos día de muertos aquí, así que decidimos hacerlo junto a ustedes para rendir homenaje a estos músicos, a los que les dedicamos el álbum [...] tal vez lo toquemos todo". En su turno, una agradable Gabriela mencionó: "que hongo, que huboles, hace rato que no estamos aquí, pero somos chilaquilies (chilangos) de aquí del defectuoso [...] bailen, hasta si quieren háganlo desnudos".

Hablaron poco con el público, lo de ellos es expresarse con las guitarras. Los asistentes acompañábamos con las palmas al ritmo de la música, haciendo está una velada inolvidable.

P.D. Niños no compren boletos de primera fila en la sección C, porque no se ve bien.

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